10Es por esto que me deleito en mis debilidades, y en los insultos, en privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo. Pues, cuando soy débil, entonces soy fuerte.2 Corintios 12:9-10Preocupación de Pablo por los corintios
Santiago 5:14-1616Confiésense los pecados unos a otros y oren los unos por los otros, para que sean sanados. La oración ferviente de una persona justa tiene mucho poder y da resultados maravillosos.
Salmos 38:3-1010Mi corazón late aceleradamente, se me acaban las fuerzas
y estoy quedando ciego.
Isaías 53:5-66Todos nosotros nos hemos extraviado como ovejas;
hemos dejado los caminos de Dios para seguir los nuestros.
Sin embargo, el SEÑOR puso sobre él
los pecados de todos nosotros.
Salmos 103:1-44Me redime de la muerte
y me corona de amor y tiernas misericordias.