Tu fe cristiana te provee la base para la vida de cada día. Como cristiano eres un discípulo de Jesús y aplicas las enseñanzas bíblicas, especialmente las enseñanzas de Jesús, a todos los aspectos de tu vida. La Biblia enseña sobre honestidad e integridad, tratar a otros con amor, dignidad y respeto, ser generoso, ayudar a los pobres, compartir tu fe, y muchas otras cosas. Todas estas tienen que ver con tu vida cotidiana. A medida que creces en tu fe observarás cambios que influirán en tu manera de vivir.