Si quieres, puedes leer la Biblia de la misma manera en que leerías cualquier otro libro: comenzado por el principio (Génesis) y leyendo hasta el final (Apocalipsis). Mucha gente lo ha hecho y lo sigue haciendo, leer la Biblia cada año de principio a fin.
Sin embargo, tal vez no sea esa la mejor manera para ti de que leas la Biblia. Quizás podrías leer Génesis, el primer libro de la Biblia, luego los primero cuatro libros del Nuevo Testamento (Mateo, Marcos, Lucas, y Juan). Estos son llamados “Evangelios” y su principal propósito es hablarnos de Jesús. Marcos es el Evangelio más breve, en tanto que Juan contiene algunos versículos fundacionales, como Juan 3:16.
También puedes seguir un plan de lectura. Hay muchos de ellos impresos y en Internet, o puedes diseñar tu propio plan. De cualquier manera que lo hagas, lee una sección, piensa en lo que dice, en lo que significa, y en la manera en que se puede aplicar a ti. Podrías hacer una oración sencilla antes de leer, algo como “Dios, por favor guía mi lectura hoy y permíteme ver y entender lo que me estás diciendo”.
También puede ser útil reunirte con una o dos personas que estén leyendo la Biblia, y compartir sus anotaciones. Mantén una computadora portátil o un block de papel cerca de donde lees y anota cualquier pensamiento y pregunta que surja mientras vas leyendo. Piensa después en lo que has anotado. Habla de ello con otras personas.